El tema de la Tierra Consagrada siempre ha sido un problema para diversas religiones y si bien para el caso de los suicidas la religiĆ³n judĆa hace excepciones por considerarlos enfermos que han perdido la razĆ³n, para el caso de las prostitutas y algunos proxenetas sĆ³lo en paĆses como Estados Unidos o Brasil existen ejemplos de cementerios dedicados que aĆŗn se mantienen en buen estado y abiertos al pĆŗblico.
En Argentina existe uno en la ciudad de Avellaneda (antiguamente Barracas al Sur), que tiene la rara caracterĆstica de ser exclusivo de rufianes y prostitutas.
En Argentina existe uno en la ciudad de Avellaneda (antiguamente Barracas al Sur), que tiene la rara caracterĆstica de ser exclusivo de rufianes y prostitutas.
Pero lo mĆ”s interesante radica en quienes lo fundaron y en los acontecimientos que finalmente lo cerraron y llevaron al abandono, como si se tratara de un pecado que debe ser eliminado de la historia de la repĆŗblica.
Los fundadores fueron un grupo de emigrados polacos judĆos que a fines del siglo XIX decidieron formar en Buenos Aires una extraƱa sociedad mutual de corte mafioso. La misma se dio en llamar Sociedad Israelita de Socorros Mutuos Varsovia, y se dedicaba a “importar” jĆ³venes polacas, la mayorĆa judĆas, desde el Este de Europa con la finalidad de explotarlas en la prostituciĆ³n.
No es sino hasta 1906 que se conforman oficialmente en Avellaneda —distrito dominado por el caudillo conservador Alberto BarcelĆ³, quien era dueƱo de varios burdeles— la "Sociedad Israelita de Socorros Mutuos Varsovia de Barracas al Sud y Buenos Aires".
La constituciĆ³n de la sociedad en Avellaneda era sĆ³lo una fachada legal ya que era el Ćŗnico distrito que le concediĆ³ la personerĆa jurĆdica gracias a BarcelĆ³.
La sede original de esta mutual en Avellaneda estaba en la Av. Mitre al 400 y el equivalente al Padrino judĆo era un tal NoĆ© Trauman, de quien se dice que era anarquista, acostumbraba arengar a los rufianes con reflexiones sobre las injusticias sociales -los verdaderos explotadores, decĆa, eran los empresarios que pagaban mĆseros salarios a sus obreros a cambio de largas jornadas de trabajo- y que fue amigo de Roberto Arlt e inspirador de Haffner, el RufiĆ”n melancĆ³lico, uno de los personajes de Los siete locos.
Las mujeres eran traĆdas engaƱadas desde Varsovia, Lodz y Cracovia con con promesas de casamientos seguros y una mejor calidad de vida de la que tenĆan en una hambreada Europa. AquĆ se encontraban con una realidad muy distinta a esas promesas y sometidas a un rĆ©gimen de cuasi esclavitud corporal, cuotas de “producciĆ³n” que cumplir, enfermedades y ni siquiera un lugar donde caerse muertas.
La Sociedad financiaba no sĆ³lo su accionar prostibulario, sino que tambiĆ©n, importaba sus propios rabinos y construĆa sus sinagogas. Llegaron a controlar unos 2000 prostĆbulos en todo el paĆs, con unas 30.000 mujeres, moviendo una cifra de dinero difĆcil de calcular aunque hay quienes arriesgan algunas cifras .
En su apogeo, luego de la Primera Guerra Mundial, la organizaciĆ³n tenĆa mĆ”s de 400 miembros (explotadores) en la Argentina. LlegĆ³ a tener ganancias anuales por mĆ”s de 50 millones de dĆ³lares. Su sede se encontraba en Buenos Aires, con sucursales en otras ciudades de la Argentina, Brasil, Nueva York, Varsovia, SudĆ”frica, India y China.
Como el negocio funcionaba maravillosamente bien, establecieron sus oficina centrales en la Av. CĆ³rdoba 3280 en pleno corazĆ³n de Buenos Aires en un grandiosos edificio de dos plantas con jardĆn, sinagoga, salĆ³n de fiestas, bar, comedor y sala de velatorios, entre otras dependencias, donde hoy se encuentra una escuela y cambiaron su nombre de Sociedad Israelita de Socorros Mutuos Varsovia por el de ZWI MIGDAL, ya que habĆan entrado en franco conflicto con la honrada colectividad judĆa de la Argentina que los expulsĆ³ formalmente. Fue en esa Ć©poca que se formĆ³ el primer enclave prostibulario en la Ciudad de Buenos Aires, delimitado por las calles Lavalle, Viamonte, Libertad y Talcahuano. la organizaciĆ³n tenĆa sus burdeles sobre las calles JunĆn y Lavalle. AllĆ se encontraban El Chorizo, Las Esclavas, Gato Negro, Marita y Las Perras, entre otros prostĆbulos, donde las mujeres sometidas a la prostituciĆ³n trabajaban de 4 de la tarde a 4 de la maƱana. Las jĆ³venes trabajaban a destajo; los proxenetas, caftenes o cafishios, exigĆan que las mujeres atendieran a un mĆnimo de 600 clientes por semana y 70 por jornada.
Dada la marginaciĆ³n a la cual fueron sometidos, tanto los rufianes como sus explotadas, por parte de sus paisanos y el estigma de “impuros” que les imponĆa su propia religiĆ³n, la Zwi Migdal se vio obligada a tener un cementerio propio, donde enterrar a su propia gente. Fue asĆ que en 1906 , en la misma Ć©poca en que BarcelĆ³ les otorgĆ³ estatus legal, adquirieron las tierras de Avellaneda donde inauguraron su “camposanto”. AllĆ mĆ”s de 2000 rufianes y mujeres explotadas, encontraron un lugar donde dormir eternamente. Hoy el cementerio estĆ” cerrado al pĆŗblico, en total estado de abandono y semi saqueado. Se encuentra adyacente al Cementerio Israelita de Avellaneda en la Av. CrisĆ³logo Larralde al 4100, en el barrio de Villa DomĆnico.
Los fundadores fueron un grupo de emigrados polacos judĆos que a fines del siglo XIX decidieron formar en Buenos Aires una extraƱa sociedad mutual de corte mafioso. La misma se dio en llamar Sociedad Israelita de Socorros Mutuos Varsovia, y se dedicaba a “importar” jĆ³venes polacas, la mayorĆa judĆas, desde el Este de Europa con la finalidad de explotarlas en la prostituciĆ³n.
No es sino hasta 1906 que se conforman oficialmente en Avellaneda —distrito dominado por el caudillo conservador Alberto BarcelĆ³, quien era dueƱo de varios burdeles— la "Sociedad Israelita de Socorros Mutuos Varsovia de Barracas al Sud y Buenos Aires".
La constituciĆ³n de la sociedad en Avellaneda era sĆ³lo una fachada legal ya que era el Ćŗnico distrito que le concediĆ³ la personerĆa jurĆdica gracias a BarcelĆ³.
Tumba de NoƩ Trauman |
Las mujeres eran traĆdas engaƱadas desde Varsovia, Lodz y Cracovia con con promesas de casamientos seguros y una mejor calidad de vida de la que tenĆan en una hambreada Europa. AquĆ se encontraban con una realidad muy distinta a esas promesas y sometidas a un rĆ©gimen de cuasi esclavitud corporal, cuotas de “producciĆ³n” que cumplir, enfermedades y ni siquiera un lugar donde caerse muertas.
NoƩ Trauman |
En su apogeo, luego de la Primera Guerra Mundial, la organizaciĆ³n tenĆa mĆ”s de 400 miembros (explotadores) en la Argentina. LlegĆ³ a tener ganancias anuales por mĆ”s de 50 millones de dĆ³lares. Su sede se encontraba en Buenos Aires, con sucursales en otras ciudades de la Argentina, Brasil, Nueva York, Varsovia, SudĆ”frica, India y China.
Como el negocio funcionaba maravillosamente bien, establecieron sus oficina centrales en la Av. CĆ³rdoba 3280 en pleno corazĆ³n de Buenos Aires en un grandiosos edificio de dos plantas con jardĆn, sinagoga, salĆ³n de fiestas, bar, comedor y sala de velatorios, entre otras dependencias, donde hoy se encuentra una escuela y cambiaron su nombre de Sociedad Israelita de Socorros Mutuos Varsovia por el de ZWI MIGDAL, ya que habĆan entrado en franco conflicto con la honrada colectividad judĆa de la Argentina que los expulsĆ³ formalmente. Fue en esa Ć©poca que se formĆ³ el primer enclave prostibulario en la Ciudad de Buenos Aires, delimitado por las calles Lavalle, Viamonte, Libertad y Talcahuano. la organizaciĆ³n tenĆa sus burdeles sobre las calles JunĆn y Lavalle. AllĆ se encontraban El Chorizo, Las Esclavas, Gato Negro, Marita y Las Perras, entre otros prostĆbulos, donde las mujeres sometidas a la prostituciĆ³n trabajaban de 4 de la tarde a 4 de la maƱana. Las jĆ³venes trabajaban a destajo; los proxenetas, caftenes o cafishios, exigĆan que las mujeres atendieran a un mĆnimo de 600 clientes por semana y 70 por jornada.
Dada la marginaciĆ³n a la cual fueron sometidos, tanto los rufianes como sus explotadas, por parte de sus paisanos y el estigma de “impuros” que les imponĆa su propia religiĆ³n, la Zwi Migdal se vio obligada a tener un cementerio propio, donde enterrar a su propia gente. Fue asĆ que en 1906 , en la misma Ć©poca en que BarcelĆ³ les otorgĆ³ estatus legal, adquirieron las tierras de Avellaneda donde inauguraron su “camposanto”. AllĆ mĆ”s de 2000 rufianes y mujeres explotadas, encontraron un lugar donde dormir eternamente. Hoy el cementerio estĆ” cerrado al pĆŗblico, en total estado de abandono y semi saqueado. Se encuentra adyacente al Cementerio Israelita de Avellaneda en la Av. CrisĆ³logo Larralde al 4100, en el barrio de Villa DomĆnico.
Reinaba en Avellaneda el Intendente y jefe del Partido Conservador de la provincia, Don Alberto BarcelĆ³ y su “relacionista pĆŗblico”, Juan Ruggiero, Ć©ste era el brazo ejecutor y nexo con las actividades ilegales que se producĆan. Sin Ć©sta complicidad polĆtica, la Zwi Migdal jamĆ”s hubiera podido desarrollar sus actividades, al menos en esa magnitud.
MuchĆsimos inmigrantes nutrieron nuestras tierras con el sudor de sus frentes, pero otros, una minorĆa, sacaron la tajada negra de todo esto, alimentados por un sistema polĆtico tolerante y cĆ³mplice en las ganancias.
Todo terminĆ³ cuando Raquel (cuyo verdadero nombre era Ruchla Laja Liberman) una trabajadora sexual que llegĆ³ al paĆs en 1922 y muriĆ³ de cĆ”ncer en 1935, junto con la AMIA, la Sociedad Israelita de ProtecciĆ³n de Mujeres y NiƱos “Ezras Noshim” y la CancillerĆa Polaca, lograran que su denuncia llegara hasta un juez incorruptible, el Dr. RodrĆguez Ocampo, provocando asĆ el inicio del fin de esta organizaciĆ³n criminal y posteriormente la ilegalizaciĆ³n de la prostituciĆ³n. En medio de su triste estancia en la Argentina Raquel fue la Ćŗnica valiente que gritĆ³ su angustia y se atreviĆ³ a desafiar a la mafia judĆa. Gracias a ella y a los cambios en la polĆtica argentina , mĆ”s de 100 rufianes fueron detenidos, aunque puestos en libertad en poco tiempo, gracias a sus “amigos” en el poder.
Ruchla Laja Liberman |
Datos curiosos:
Algunos vecinos atestiguan que en el aƱo 1964, cuando la Municipalidad de Avellaneda decidiĆ³ ensanchar la calle El Salvador que corre al costado del predio, se debieron quitar unos 10 mts del cementerio a lo largo de toda la cuadra entre las calles Av. Larralde y Arredondo, y que lo hicieron sacando las lĆ”pidas de las tumbas y trasladĆ”ndolas a otro lugar. Dicen que se asombraron mucho cuando vieron que las palas mecĆ”nicas alisaban el terreno sin efectuar ninguna exhumaciĆ³n de las tumbas. Eso quiere decir que los restos no fueron removidos y que aĆŗn se encuentran debajo de lo que hoy es la vereda y la mitad de la calle.
De estas prostitutas judĆas quedĆ³ en el lunfardo una expresiĆ³n ya en desuso: «papusa» o «papirusa», palabra que se origina del polaco «papierosy»: cigarrillo, palabra muy comĆŗn en boca de las prostitutas polacas, que solĆan pedir a sus clientes tabaco con algo que sonaba parecido a «dame papirusa» y que quedĆ³ como sinĆ³nimo de mujer bella y deseable.
SegĆŗn TomĆ”s de Escobar en su «Diccionario del hampa y el delito», otra expresiĆ³n lunfarda como cafishio, sinĆ³nimo de proxeneta, parece derivar para algunos de otra palabra lunfarda ya en desuso, caftĆ©n, que parece derivar del turco caftĆ”n, un abrigo largo y grueso que solĆan usar los judĆos ortodoxos. TambiĆ©n, las prostitutas polacas introdujeron el uso del bidĆ© en Argentina.
Algunos vecinos atestiguan que en el aƱo 1964, cuando la Municipalidad de Avellaneda decidiĆ³ ensanchar la calle El Salvador que corre al costado del predio, se debieron quitar unos 10 mts del cementerio a lo largo de toda la cuadra entre las calles Av. Larralde y Arredondo, y que lo hicieron sacando las lĆ”pidas de las tumbas y trasladĆ”ndolas a otro lugar. Dicen que se asombraron mucho cuando vieron que las palas mecĆ”nicas alisaban el terreno sin efectuar ninguna exhumaciĆ³n de las tumbas. Eso quiere decir que los restos no fueron removidos y que aĆŗn se encuentran debajo de lo que hoy es la vereda y la mitad de la calle.
De estas prostitutas judĆas quedĆ³ en el lunfardo una expresiĆ³n ya en desuso: «papusa» o «papirusa», palabra que se origina del polaco «papierosy»: cigarrillo, palabra muy comĆŗn en boca de las prostitutas polacas, que solĆan pedir a sus clientes tabaco con algo que sonaba parecido a «dame papirusa» y que quedĆ³ como sinĆ³nimo de mujer bella y deseable.
SegĆŗn TomĆ”s de Escobar en su «Diccionario del hampa y el delito», otra expresiĆ³n lunfarda como cafishio, sinĆ³nimo de proxeneta, parece derivar para algunos de otra palabra lunfarda ya en desuso, caftĆ©n, que parece derivar del turco caftĆ”n, un abrigo largo y grueso que solĆan usar los judĆos ortodoxos. TambiĆ©n, las prostitutas polacas introdujeron el uso del bidĆ© en Argentina.
Fuentes: Daniel Eugenio Pena y Wikipedia
GENIAL
ResponderEliminarSe habla de un cementerio para esas mujeres prostis, sin embargo, los hombres discriminan pero Dios nĆ³, porque en la Biblia se dice que tanto el hombre como las bestias van a un mismo lugar..!
ResponderEliminar"Porque hay un suceso resultante respecto a los hijos de la humanidad y un suceso resultante respecto a la bestia, y ellos tienen el mismo suceso resultante. Como muere el uno, asi muere la otra, y todos tienen un solo espĆritu , de modo que no hay superioridad del hombre sobre la bestia, porque todo es vanidad. Todos van a un solo lugar .Del polvo han llegado a ser todos, y todos vuelven al polvo.""
Como se ve Sr. O Pin, los comunes no vamos al cielo al morir. SĆ³lo los 144.000 mencionados en Apocalipsis cap. 14:1 / 1Pedro : 2:9 Con Cristo
serƔn reyes y co-gobernarƔn hacia la atierra.- Cuando desee aprender mas de las Santas Escrituras, espero que ubique a un Testigo de JehovƔ. Un saludo!
en Rosario,tambien existio un cementerio de prostitutas,para ser mas precisa,en Granadero Baigorria,al que visite cuando estudie sobre lunfardo para una tesis,y en aquel momento,era un anexo del cementerio de la localidad mencionada,donde se daba entierro a las trabajadoras de burdeles,que abundaban,tan es asi que a Rosario se la llamaba la chicago Argentina,en la epoca del esplendor de su puerto,hay una pelicula excelente que ilustra muy bien esta epoca,y se llama la mala vida,con Hugo del Carril
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